Autor:
José Luis Mármol
La primera del año y en la frente, 21km por un trazado urbano que nos hizo recordar a nuestra entrañable Expo 92. Mas de 1700 corredores nos dimo cita para arrancar desde el Parque del Alamillo y terminar en el Estadio Olímpico , batiendo el récor de participantes de años anteriores.
Después de pasar por el mítico barrio de San Gerónimo, cuna de nuestro compañero Agustín, en donde fuimos vitoreados como auténticos campeones, por unos vecinos que no dudaron en echarse a la calle a nuestro paso, cruzamos el Puente de la Barqueta y nos dirigimos al Jardín Americano, junto al rio Guadalquivir, en donde recorrimos las calles de la Isla de la Cartuja para dirigirnos a la otra margen del rio, y la calle Torneo.Y desde aquí directos al Estadio Olímpico, no hay mejor final que este para cualquier corredor.
El tiempo acompaño, un día soleado y una temperatura de 14 grados que hicieron de esta , una magnifica prueba, gracias por su puesto al Club de Atletismos San Pablo, organizador del evento.
En esta ocasión, habíamos preparado la prueba a conciencia, ya que llevábamos desde la ultima Media de los Palacios entrenando. Además , lo estuvimos haciendo con un grupo de corredores que conocía Agustín del Parque de Miraflores, y la verdad, nos ayudaron muchísimo a incrementar nuestro ritmo y mejor los tiempos.
Habíamos quedado en el Parque temprano, para recoger los dorsales y calentar un poco antes de comenzar. Como de costumbre Agustín llego tarde, aunque pudimos localizarlo en la línea de salida y comenzar juntos la carrera.Jose se propuso seguir al grupo del Parque de Miraflores e intentar hacer la carrera con ellos, a un ritmo muy fuerte, pero a partir del km 14 tuvo que dejarlos ir y seguir solo a su ritmo .Agustín decidió acompañarme al menos hasta el km 10 e intentar tirar de mi lo máximo, ya que yo no estaba físicamente nada bien, debido al resfriado que tuve dos semanas atrás y que me impido entrenar prácticamente nada. Tiro de mi hasta el km 7 donde le dije que siguiera solo y que yo intentaría acabar como pudiera.
Una carrera que se me hizo muy dura a partir del km 12 ya que empezaron a dolerme las uñas de los pies de nuevo y al intentar cambiar la postura de la pisada, comenzaron a dolerme los gemelos. Me enganche a una chica que llevaba un ritmo muy tranquilo , y junto a ella conseguí acabar, pues la verdad, iba francamente mal. A pesar de todo ,contento con la actuación, y dispuestos a correr la Maratón de Sevilla el próximo mes de febrero.
1317 Jose Luis: 1:56
914 Agustin: 1:45
685 Jose: 1:40
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Autor:
José Luis Mármol
Comenzamos el año (para ir haciendo piernas, después del parón navideño) con una nueva ascensión, La Maroma. Siendo este el punto mas alto de la provincia de Málaga, pertenece al proyecto 8 provincias 8 cumbres que comenzamos el año pasado.
Es sin duda, una de las rutas mas sugerentes del Parque Natural Tejada, Almijara y Alhama. Con sus 2065 m. de altitud, se convierte en el pico mas alto de este espacio protegido, que se sitúa en Sierra de Tejada.
Hay varias rutas para dicha ascensión, y nosotros nos decantamos por la cara norte desde la casa forestal del Robledal Alto. Desde aquí ,nos esperaban 14 km. aproximadamente, de una suave pero interminable subida, durante la cual observamos los diferentes pisos bioclimáticos, cada uno de ellos con sus especies vegetales, singulares y difíciles de ver en otra zona del parque, como son robles, encinas, quejigos, abetos y cedros.
En esta ocasión fuimos Carlos, Manuel, Jesús que vino acompañado por su amigo Pablo, Juampi que era su primera salida como nuevo miembro del club y yo José.
Partimos de Sevilla , en dirección a Zafarraya para coger la carretera C-335 y justo en la Venta de la Alcaiceria tomamos un carril forestal ,que nos llevaría al área recreativa y casa forestal del Robledal Alto, donde dejamos los coches. Desde aquí tomamos dirección sur, un carril que sube hacia la zona conocida como los Barracones , donde encontramos una cadena para limitar el paso de vehículos y poco después un sendero desde donde comienza la verdadera subida que nos llevaría hasta el punto mas alto de este Parque Natural.
No paro de nevar durante toda la ruta, y aunque sabíamos que la cota de nieve había bajado días atrás hasta los 200 metros, no esperábamos tal cantidad de nieve. Lastima que no despejo la niebla en todo el día y no pudimos disfrutar de las vistas en la cima y durante el recorrido, pero aun así mereció la pena, pues el lugar es increíble y la ruta preciosa y muy singular.
Una vez de vuelta a los coches y tras ocho horas de pateo, dimos buena cuenta del piquislabis que tenia preparado Carlos y que nos pareció un exquisito manjar de los dioses, aunque la próxima vez, debería de dejarse de tanto salchichón y echar mas jamón.
Por destacar algo negativo del día, la fuerte ventisca cerca de la cima, el frio que hizo mella en las manos de Carlos, que espero haya tomado buena nota para la próxima vez y las botas de mier……..da que llevaba Pablo y que le hacían resbalar a cada paso que daba y que retrasaba la marcha normal del grupo, y a Manuel decirle que coma mas plátanos como el que se metió a mitad del camino, para que no le den calambres en las piernas,como le paso cerca de la cima.
Sin duda lo volveremos a repetir, aunque la próxima vez cambiaremos la ruta y haremos la subida desde Canilla del Aceituno, por el Camino de las Nieves………….
En nuestras expediciones de montaña, unas veces se lograron los objetivos y otras se fracasó en el intento, pero lo verdaderamente importante fue siempre el poder trasladar esas experiencias vividas a nuestra sociedad, contribuyendo a configurar el carácter emprendedor que tanto define al ser humano, en distintas facetas de la vida cotidiana.
Quizá sea ese, el secreto añadido, que hace del logro inútil de la aventura, la virtud más generosa, y el más preciado don del aventurero.
cita : Juan Manuel Maestre Carbonell
Después de pasar por el mítico barrio de San Gerónimo, cuna de nuestro compañero Agustín, en donde fuimos vitoreados como auténticos campeones, por unos vecinos que no dudaron en echarse a la calle a nuestro paso, cruzamos el Puente de la Barqueta y nos dirigimos al Jardín Americano, junto al rio Guadalquivir, en donde recorrimos las calles de la Isla de la Cartuja para dirigirnos a la otra margen del rio, y la calle Torneo.Y desde aquí directos al Estadio Olímpico, no hay mejor final que este para cualquier corredor.
